“El periodismo debe entregar información descontaminada a la audiencia”

Respuesta de Javier Darío Restrepo
El periodista utiliza las fuentes como un medio para encontrar la verdad que les debe a sus audiencias.
Así se descarta la idea del periodista intermediario, que le sirve a la fuente como amplificador de su voz; esta tarea la cumplen los relacionistas públicos o los publicistas; pero no es y no puede ser la tarea de un periodista.
También se descarta la idea de que obtenida la entrevista o el testimonio de la fuente, el trabajo del periodista termina y solo queda la tarea de reproducción. Cuando una fuente habla, comienza el trabajo de confirmar, de ampliar o de explicar la información que la fuente provee. Por principio, el periodista duda de todas las fuentes, especialmente de las que están en el poder. A mayor poder, más razones para engañar.
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No se trata de complacer a la fuente sino de servir con una información descontaminada a las audiencias.
Es particularmente apremiante someter a una rigurosa comprobación toda afirmación contra el buen nombre o la fama de alguien. Cuando no se comprueba, el periodista corre el riesgo de ser utilizado por personas que tiran la piedra y se esconden detrás del periodista. No constituye explicación ni exculpación alguna afirmar que la acusación publicada va entre comillas o con el nombre de su autor. Es obligación del periodista comprobar la acusación y, si es el caso, darle al acusado oportunidad de responder al acusador, antes de cualquier publicación.